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lunes, 27 de enero de 2020

Salid de las Ciudades



"SALID DE BABILONIA" VS "SALID DE LAS CIUDADES"
El llamado a salir de las ciudades es claro y enfático en los escritos de Elena White: “Educad a los integrantes de nuestro pueblo para que salgan de las ciudades y vayan al campo, donde pueden obtener porciones pequeñas de tierra y construir un hogar para ellos y sus hijos...” DCC p. 10. Un estudio cuidadoso de las santas Escrituras revela que Elena White tiene razón: las ciudades no son el mejor lugar para los hijos e hijas de Dios. Pero como muchos hoy estamos cometiendo el error de Lot (Génesis 13), nos rehusamos a poner en práctica el consejo inspirado. Predicamos que hay que "Salid de Babilonia", pero permanecemos en las ciudades pecaminosas sin querer salir de ellas. Pareciera que muchos todavía no nos percatamos de los diversos peligros encontrados en la ciudades del mundo. Una demora innecesaria en salir de la ciudades puede todavía traernos desastrosos resultados.
La Biblia dice que Lot motivado por la búsqueda de ventajas terrenales estableció sus tiendas hasta la ciudad de Sodoma (Génesis 13:12). Su mala decisión trajo sufrimiento, desmoralización, y perdición a su familia. Conocemos bien la historia: los ángeles destructores de Dios vinieron a sacar a Lot de la perversa ciudad antes de qué esta fuera totalmente destruida. Su esposa quedó convertida en una estatua de sal y sus hijos todos corrompidos.
Los tiempos no han cambiado. Dios hoy nos vuelve a recordar su voluntad. Las ciudades pecaminosas en extremo volverán a sufrir los juicios divinos. Debemos salir de las ciudades para después seguir trabajándolas y amonestarlas desde afuera.
¿Pero será que realmente debemos salir de las ciudades? No será que algunas de las cosas que Elena White escribió sobre las ciudades ya no aplican a nuestros días? Analicemos los peligros en las ciudades según los escritos de Elena White para ver si todo lo que ella escribió es todavía relevante.
TENTACIÓN Y EL AMOR A LOS PLACERES: “En vez de la ciudad atestada, buscad algún lugar apartado, donde vuestros hijos estén, hasta donde se pueda, protegidos de la tentación, y allí educadlos para ser útiles.” DCC p. 4. “Una de las tentaciones más sutiles y peligrosas que asaltan a los niños y a los jóvenes en las ciudades es el afán de placeres”. -DCC p. 5
RIESGOS A NUESTRA SALUD FÍSICA: “El ambiente físico de las ciudades es muchas veces un peligro para la salud. La exposición constante al contagio, el aire viciado, el agua impura, el alimento adulterado, las viviendas oscuras, malsanas y atestadas de seres humanos, son algunos de los muchos males con que se tropieza a cada paso”. -DCC p. 5
LOS JUICIOS DE DIOS CAERÁN SOBRE LAS CIUDADES: "Se me pide que declare el mensaje de que las ciudades llenas de transgresión y pecaminosas en extremo, serán destruidas por terremotos, incendios e inundaciones. Todo el mundo será advertido de que existe un Dios que hará notoria su autoridad como Dios. Sus agentes invisibles causarán destrucción, devastación y muerte. Todas las riquezas acumuladas serán como la nada..." DCC p. 6. "Existen razones por las que ni deberíamos edificar en las ciudades. Sobre ellas pronto caerán los juicios de Dios". -Carta 158, 1902. DCC 7.1
LA OBSERVANCIA DEL SÁBADO: “Donde el colegio está establecido [en Australia] debe haber terreno para huertos y jardines, donde los estudiantes puedan hacer ejercicio físico combinado con trabajo mental, y así algunos paguen la mitad o todo su curso en el colegio. También debería comprarse terreno, en el que las familias que no pueden obtener trabajo en las ciudades a causa de la observancia del sábado, puedan comprar pequeñas granjas y ganarse la vida. Esta es una real necesidad en este país”. -El Ministerio de la Bondad, p. 192
EL PELIGRO DE PERDER NUESTRA ALMA: "En armonía con la luz que me fue dada, insto a la gente a salir de los grandes centros poblados. La perversidad de nuestras ciudades aumenta, y cada vez resulta más evidente que los que permanezcan innecesariamente en ellas, correrán el peligro de perder sus almas". - Manuscrito 115, 1907. DCC 8.1
DIFICULTAN LA FORMACIÓN DEL CARÁCTER CRISTIANO: "Ni una familia de cada cien se beneficiará en el aspecto físico mental o espiritual, por residir en la ciudad. Es mucho más fácil obtener fe, esperanza, amor y felicidad en los lugares apartados, en medio de los campos, las montañas y los árboles. Alejad a vuestros hijos de las escenas y los sonidos de la ciudad, del bullicio y el estrépito de los tranvías y carros, y su mente se fortalecerá. Descubriréis que es más fácil que la verdad de la Palabra de Dios halle morada en sus corazones". - Manuscrito 76, 1905. DCC 13.1. "Enviad a los niños a las escuelas ubicadas en la ciudad, donde cada faceta de la tentación está lista para atraerlos y desmoralizarlos, y la tarea de edificar su carácter será diez veces más difícil tanto para los padres como para los hijos". - Fundamentals of Christian Education, 326 (1894). DCC p. 13
Queda pues claro que lo que Elena White escribió hace muchos años sobre las ciudades es algo real. Los peligros en las ciudades mencionados en sus escritos todavía existen (y en grados muchos mayores, yo diría). Los que quieran obedecer a Dios analizaran cuidadosamente su situación actual y buscaran la manera de salir de su ciudad tan pronto perciban el peligro. La siguiente declaración nos amonesta a no vacilar ni demorar cuando se debiera actuar:
“Esta madrugada no pude dormir después de las dos. Durante la visión de la noche me veía en una junta. Estaba rogando a varias familias que aceptasen las instrucciones establecidas por Dios y saliesen de las ciudades para salvar a sus hijos. Algunas de ellas dejaban pasar el tiempo sin tomar una determinación.
Los ángeles de la misericordia apresuraron a Lot, a su esposa y a sus hijas tomándolos de las manos. Si Lot se hubiera apresurado tal como el Señor lo deseaba, su esposa no se habría convertido en una estatua de sal. Lot adolecía de un marcado espíritu de dilación. No seamos como él”. -DCC p. 7
Dios nos ha mostrado claramente que nuestros hogares, las escuelas Adventistas, sanatorios, y casas publicadoras debieran establecerse fuera de las grandes ciudades. Dentro de las ciudades debemos tener nuestros templos, restaurantes, centro médicos pequeños, y centros para la capacitación rápida de misioneros. A veces nos será necesario tener escuelas Adventistas en la ciudades ya que muchos de nuestros niños y jóvenes todavía viven en los centros urbanos del mundo.
Los que tienen a Jesús en su corazón no solamente saldrán de Babilonia, sino que también saldrán de las ciudades extremadamente pecaminosas. Dios nos quiere alejar de los muchos peligros en las ciudades del mundo, pero el diablo hace lo opuesto y nos seduce hacia las ciudades: "Satanás tiene el propósito de atraer a las ciudades a los hombres y a las mujeres, y con el fin de lograrlo inventa toda clase de novedades y diversiones, y toda clase de recursos que resultan excitantes. Y las ciudades del mundo están llegando a ser hoy como las ciudades que existían antes del diluvio...". - Mensajes Selectos 2:407, 408. DCC 13.5
"La misma voz que amonestó a Lot a que saliese de Sodoma, nos ruega: 'Salid de en medio de ellos, y apartaos... Y no toquéis lo inmundo'. 2 Corintios 6:17. Aquellos que obedezcan esta amonestación encontrarán un refugio. Que cada hombre esté bien despierto y procure salvar a su familia. Que se ciña para realizar el trabajo. Dios revelará punto por punto qué debe hacer después". DCC p. 5
“Acordaos de la mujer de Lot” Lucas 17:32.
NOTA ESPECIAL: La tecnología de hoy con su red cibernética, el celular inteligente y las antenas parabólicas llevan las tentaciones y los placeres en las ciudades a casi todo lugar, incluyendo al campo. O sea que hoy alguien puede salir de la ciudad al campo pero todavía quedarse con la tentación y los placeres de la ciudad en su televisión, teléfono o computadora. Tengamos mucho cuidado. Hoy es mucho más dificil “salir de la ciudad” que en los tiempos de Elena White.
Autor: Jacinto Flores Jr.

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